Según se ha informado, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, levantará las condiciones de derechos humanos impuestas a la venta de armas a Bahréin, a pesar del historial de opresión contra los disidentes de ese país y de su participación en la coalición encabezada por Arabia Saudí que ha bombardeado a miles de civiles en Yemen. Yemen es uno de los seis países de mayoría musulmana incluidos en la orden ejecutiva revisada de Trump sobre la prohibición de viajar.

Sunjeev Bery, director de Captación de Apoyos de Amnistía Internacional Estados Unidos, ha hecho la siguiente declaración a este respecto:

“Mientras recibe armas de Estados Unidos, el gobierno de Bahréin está silenciando a quienes le critican en su país y está participando en una coalición militar que bombardea a civiles en Yemen. Esto transmite una peligrosa señal tanto a Bahréin como a todos los demás países que cometen violaciones graves de derechos humanos. Resulta especialmente mortificante armar a estos gobiernos al mismo tiempo que se impide la entrada en Estados Unidos a quienes huyen de la violencia. Estos acuerdos ponen a Estados Unidos en peligro de ser cómplice de crímenes de guerra, y desalientan a otros países, como Arabia Saudí, de abordar sus propios historiales de derechos humanos.”

 Montse Tiana (en nombre del AILRC-ES)