Una delegación de Amnistía Internacional acaba de regresar de las islas italianas de Lampedusa y Sicilia, al sur del país, tras recopilar los testimonios de personas migrantes y refugiadas rescatadas en el mar Mediterráneo central.
El sábado 25 de abril, el navío de la Armada italiana Foscari puso a salvo a más de 300 migrantes, refugiados y solicitantes de asilo africanos tras rescatarlos de tres barcos distintos en alta mar.Una delegación de Amnistía Internacional fue testigo del proceso de desembarco en el puerto italiano de Augusta y entrevistó a algunos supervivientes poco después de su llegada a tierra firme. Entre los rescatados había un gran número de somalíes y nigerianos, además de personas de otras nacionalidades.Se teme que se hayan perdido ya unas 1.700 vidas en el Mediterráneo en los meses transcurridos de este año.A pesar de los compromisos adquiridos por la Unión Europea y los Estados miembros, en una cumbre celebrada el pasado jueves en Bruselas, de aportar más fondos y medios para su Operación Tritón de control de fronteras, sigue planteando interrogantes en lo relativo a su zona de operaciones. Mientras los buques no patrullen en la zona más cercana a los lugares donde tienen lugar la mayoría de los naufragios -como la predecesora de Tritón, Mare Nostrum- se perderán nuevas vidas.