El Papa tendrá que asegurar medidas globales contra los abusos sexuales de menores cometidos por los clérigos de la Iglesia Católica Romana, declaró Amnistía Internacional en vísperas de la visita del Papa Benedicto XVI al Reino Unido."El reconocimiento de la gravedad de estos abusos por el Papa Benedicto será más que bienvenido, pero se espera además que asegure que ningún otro niño sufre abusos sexuales por parte de curas y que los afectados puedan acceder a la justicia y exigir reparaciones", afirmó Claudio Cordone, Director Adjunto de Amnistía Internacional.El Papa Benedicto XVI llegará este jueves 16 al Reino Unido para una visita estatal de cuatro días; es la primera visita hecha por un Papa a este país.El pronunciamiento de Amnistía Internacional se hace pública en medio de las crecientes evidencias de abusos a menores cometidos en el seno de la Iglesia Católica y la falta de condenas a los perpetuadores.La Santa Sede está obligada por la Ley Internacional a proteger los derechos humanos de los niños y niñas, asegurar que los autores de estos abusos sean juzgados y proporcionar reparaciones a las víctimas. Estas obligaciones se están incumpliendo."La Santa Sede debe asegurar que los oficiales de la Iglesia Católica cooperan con las investigaciones penales, dan acceso a archivos de investigaciones internas y brindan disculpas oficiales y reparaciones a los supervivientes", señaló Claudio Cordone.Amnistía Internacional también insta a la Santa Sede a no continuar oponiéndose y reconocer los derechos sexuales y reproductivos, apoyando así a que mujeres y hombres ejerciten estos derechos libremente, sin represión, discriminación ni violencia.La organización envió un comunicado al Papa Benedicto el pasado mes de junio, exigiendo que la Santa Sede cumpla plenamente con sus responsabilidades y obligaciones internacionales, así como solicitando información sobre las medidas tomadas en estas cuestiones. Sin embargo, la carta aún no ha sido contestada y los requisitos aún no han sido atendidos."Del mismo modo que los pronunciamientos de la Santa Sede han sido positivos en cuestiones como la abolición de la pena de muerte y otros importantes asuntos de derechos humanos, lo pueden ser también para la lucha contra la discriminación sufrida por mujeres, hombres y niños por todo el mundo. También es necesario escuchar las voces y ver acciones concretas de los líderes de la Iglesia Católica a respecto a estos temas", concluyó Cordone.