La muerte hoy de un adolescente atrapado en un tiroteo entre policías y presuntos miembros de una banda delictiva en una favela de Río de Janeiro es una trágica ilustración de la urgente necesidad de que Brasil reforme drásticamente su enfoque de la labor policial. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional.
"Llevamos mucho tiempo documentando la escalofriante táctica de 'primero dispara y luego pregunta' utilizada por la policía en Río de Janeiro durante sus operaciones de seguridad en las favelas. Este enfoque tipo 'salvaje oeste' de la labor policial está dejando tras de sí un trágico rastro de sangre y sufrimiento", ha manifestado Atila Roque, director ejecutivo de Amnistía Internacional Brasil.
Cristian, de 13 años, jugaba al fútbol en la favela de Manguinhos, en Río de Janeiro, cuando unos agentes de la policía militar y civil entraron en la comunidad y se enzarzaron en un tiroteo con un grupo de hombres. Una de las balas alcanzó a Cristian, que murió en el acto. Según testigos presenciales, después del suceso los policías trataron de limpiar el lugar del crimen.
"Esta trágica muerte debe investigarse urgentemente, y los responsables deben comparecer ante la justicia. Cristian no debe ser simplemente un número más en la larga y atroz lista de niños y jóvenes muertos brutalmente en las favelas en los últimos años."