Amnistía Internacional lanza una nueva campaña en la que pide a personas de todo el mundo que ayuden a hacer visible para toda la población el apoyo público al derecho al aborto.
Durante los últimos 30 años se han producido grandes avances en la lucha por el derecho al aborto, con leyes que han cambiado la situación a mejor en más de 60 países. Sin embargo, aún queda mucho por lograr, mientras los progresos se encuentran amenazados.
Desde Argentina hasta Benín, pasando por Irlanda o Francia, visionarias defensoras y defensores de los derechos humanos han conseguido grandes avances en el reconocimiento formal del derecho al aborto. Las protestas de mujeres contra los talibanes en Afganistán, las protestas de #MahsaAmini en Irán y las protestas de #GreenWave en Latinoamérica dan también testimonio de la extraordinaria valentía de los y las activistas que reclaman los derechos sexuales y reproductivos.
Sin embargo, en estos momentos, el mundo está presenciando también los crecientes esfuerzos por frustrar ese progreso, por deshacer los logros duramente ganados y promover en su lugar políticas y leyes que niegan a millones de personas sus derechos sexuales y reproductivos.
La campaña de Amnistía Internacional “1000 maneras de apoyar el derecho al aborto”, que se lanza hoy a través de todos los canales de redes sociales de la organización, ofrece maneras atractivas e influyentes para que todo el mundo se sume, realizando esfuerzos en todo el planeta para oponer resistencia a la erosión de los derechos y proteger el derecho al aborto.
“En países como Ghana, Polonia, Venezuela y Estados Unidos, profesionales de la medicina, la enfermería y la educación, así como activistas, que defienden el derecho al aborto y proporcionan servicios esenciales para salvar vidas, sufren amenazas, intimidación, denigración, estigmatización y procesamientos injustos. Pese a ello, se alzan por nuestro derecho universal a la dignidad en los ámbitos más íntimos del sexo y la reproducción: les debemos nuestro apoyo manifiesto y nuestra solidaridad visible”, ha declarado Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional.
“La campaña de Amnistía sobre el derecho al aborto proporciona una plataforma con la que apoyar claramente a personas en donde quiera que estén y expresar un apoyo público al derecho al aborto de la manera que más convenga a dichas personas: una colaboración en TikTok con seres queridos, una encuesta entre un círculo de amistades o la firma de una petición pública. Formas sencillas, orientadas a la acción, que, al adoptarlas de forma conjunta, eleven la visibilidad pública del generalizado, pero a menudo descartado, apoyo global al derecho al aborto. Si mantenemos nuestra unión —de forma visible y clara— podemos hacer que a quienes ocupan el poder les resulte mucho más difícil ignorar nuestras reclamaciones.”
Hace dos años, el 24 de junio de 2022, la Corte Suprema de Estados Unidos anuló la sentencia Roe v. Wade, que hasta entonces había garantizado el derecho constitucional al aborto.
“Al enfrentarnos a discursos públicos amplificados contra el aborto, y con las políticas y la legislación contra el aborto ganando terreno en determinados países, debemos mantenernos firmes. Por quienes necesitan atención relativa al aborto, y por quienes proporcionan esa atención, a menudo en contextos de odio, nuestra solidaridad y nuestro apoyo deben ser tangibles, inequívocos y visibles”, ha manifestado Agnès Callamard.
A lo largo del último año, Amnistía Internacional ha publicado varios informes centrados en el derecho al aborto en el mundo, sobre cuestiones como la despenalización del aborto en Marruecos, los obstáculos al derecho al aborto en Irlanda del Norte, y la necesidad de reconocer y proteger a quienes defienden el derecho al aborto. Más recientemente, la organización publicó un informe en el que exponía con detalle cómo las organizaciones que defienden la salud y los derechos reproductivos han informado de que su contenido relacionado con el aborto ha sido eliminado o marcado como contenido sensible, mientras que a algunas incluso las han suspendido temporalmente de plataformas como Facebook, Instagram y TikTok.