El dirigente indígena en el exilio Segundo Alberto Pizango Chota fue puesto en libertad el 27 de mayo. Había sido detenido el día anterior en el aeropuerto de Lima, Perú, inmediatamente después de regresar de su exilio en Nicaragua.Alberto Pizango, dirigente de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (AIDESEP), llevaba exiliado en Nicaragua desde mediados de junio de 2009. Aterrizó en el aeropuerto de Lima en un vuelo desde Nicaragua el 26 de mayo. A su llegada fue detenido inmediatamente por la policía, pero ayer (27 de mayo) quedó en libertad.El juez responsable del caso resolvió que Alberto Pizango debía quedar en libertad. Sin embargo, los cargos a los que se enfrenta no han sido retirados, y sigue enfrentándose al procesamiento.En una declaración realizada poco después de su liberación, Alberto Pizango dijo que había regresado a su país de origen, Perú, no sólo para hacer frente a la ley y demostrar que es inocente de los cargos que se le imputan, sino también para contribuir a la necesaria reconciliación entre los peruanos, siempre que se les reconozca como pueblos y se les reivindique como ciudadanos en condiciones de igualdad.
Nuestro agradecimiento a quienes enviaron llamamientos. No se requiere ninguna nueva acción por el momento. Seguiremos el caso de cerca y emprenderemos nuevas acciones, si se considera necesario.